El dinero no es bueno ni malo. Nuestra percepción de él es simplemente una creencia que ha pasado a vivir en nuestras mentes. El dinero es una forma de energía que puede financiar cualquier cosa, desde búsquedas celestiales a holocaustos.
El dinero es abundante. Está alrededor nuestro. Imaginen, por un momento, la cantidad de dinero que fluye hacia y desde nuestras manos en el plazo de un año. La mayor parte de él no lo conservan ¿no? Lo usan solamente para comprar comida, ropa, etc. Y pagar su renta o su hipoteca. Su dinero fue convertido en bienes y servicios para su uso pero continúa circulando de sus manos a las manos de otros. Aún el dinero que ponen en el banco fue prestado a otros para otros propósitos.
Ahora imaginen la cantidad de dinero que fluye hacia y desde las manos de cualquiera de su familia y en su vecindario y en su lugar de trabajo. Eso es un montón de dinero ¿no lo es? Simplemente continúa fluyendo desde y hacia las manos de su panadería y del banco con el que hacen negocios. Incluye la compañía de energía y su compañía de teléfono. Ahora estamos hablando de un río de dinero que está fluyendo por todas partes. Siéntense alguna vez y observen esto. Apenas pueden encontrar un sitio en que el dinero no está fluyendo de un par de manos a otro. Y nadie realmente se lo queda. Solamente lo usan y lo ponen en lugares que tienen su nombre. Cuentas de banco y cosas como esas. Esos son los verdaderos patrimonios, capitales, fondos mutuos y cosas del estilo.
Sumen ahora todo el dinero que va y viene de las manos de su estado o gobierno local. Más agregados al Río. ¿Qué del dinero que viene y va de las manos del Gobierno Federal de Estados Unidos. Incluyan Japón, Canadá, Australia, el Medio Oriente y todos los países europeos. Enormes cantidades de dinero. Ahora incluyan el resto del mundo. Trillones de dólares por día cambian de manos por todo el planeta y una plétora de bienes y servicios son creados en el proceso. El Río del Dinero, como la abundancia espiritual, es ilimitado. No hay manera de medir realmente qué tan grande es.
Ustedes y yo estamos parados a la vera del Río del Dinero mirándolo fluir hacia adelante. Es tan ancho que no podemos ver la otra orilla. Es tan profundo que nadie puede encontrar su fondo. Y es nuestro para ser usado por nosotros y cualquier otro. Algunos de nosotros nos acercamos al Río del Dinero con pensamiento de escasez. Venimos con una cucharilla de té para tomar apenas lo necesario para nuestras necesidades percibidas. De algún modo pensamos que cuanto más tomamos más nos acercamos a la codicia y hay menos para los otros. No nos damos cuenta que cuanto más usemos más creamos. Cuanto más usemos, más generamos abundancia para otro a través de las cosas que compramos. Cuanto más usamos, más libertad tenemos de extender amor en el mundo.
Algunas personas vienen al Río del Dinero con una taza de té. Eso es mejor que una cucharilla de té. Otros vienen con un contenedor de 5 galones. Yo he ido a él con una piscina. Ross Perot viene a él con el lecho de un lago y Bill Gates viene a él con el Gran Cañón. Ninguno de nosotros, sin embargo siquiera ha mermado el tamaño del Río. El dinero fluye a través de nosotros y crea cualquier cosa, desde puestos laborales a software que transforma el mundo hasta videos de EFT a bajo costo (eso también transforma el mundo).
Como he dicho, el dinero no es ni bueno ni malo. Es energía abundante que fluye en un río y está disponible para todos nosotros. Su “bondad” o “maldad” radica sólo en las percepciones que están escritas en nuestros muros. Nuestros pensamientos habituales devienen nuestra realidad.
Abrazos, Gary
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